California Adventure: San Francisco

¡Empieza lo bueno!

Hace exactamente una semana y un día estaba llegando al hotel en San Francisco para empezar la que fue una de las mejores semanas de mi vida. Y llovía, pero a mi me dio igual.

En el aeropuerto me encontré a Raquel, Paula una chica de granada, Imm de Tailandia y a Hajin de Korea del Sur y que acabaría siendo una de las mejores amigas que he hecho en este viaje.

Nada más llegar, Halsey, la coordinadora del viaje nos explicó todo y nos dio las camisetas y las llaves de la habitación, y antes de ni siquiera subir a dejar las maletas tuve que darles un merecido abrazo a Marta y Pablo, que estaban allí esperándome con ansias.

Después de eso, nos sentamos en uno de los vestíbulos y empezamos a hablar con la gente. Encontré a Brais y Claudia y conocí a más españoles como Pablo, Andrea, Paula y Marina, a George de la República Checa, a Quang de Vietnam, Finn y las chicas alemanas, a Hope de Nueva Zelanda...

Luego en la cena ya empezamos a hablar. Además tuvimos una pequeña presentación donde Halsey y Alex (las monitoras) se presentaron y nos contaron las reglas.

Después de cenar estuvimos hablando un poco más y luego nos fuimos a dormir.

A la mañana siguiente, después de desayunar (igual no me pasé un poquito ni nada) cogimos el bus dirección a San Francisco por primera vez para ver la que es una de mis ciudades favoritas en el mundo.

La gente se apelotonaba en las ventanas cuanto más nos acercábamos a la bahía, la primera vista de San Francisco estaba ante nuestros ojos, edificios altos se alzaban ante nuestras cabezas, el Golden Gate de fondo, Cable Cars circulaban a nuestro alrededor y la emoción podía sentirse en todas y cada una de las 50 personas que estábamos metidas en el autobús conducido por Cowboy Joe.

Nos bajamos justo en frente del Pier 39, famoso por dar hogar a muchísimos leones marinos, y como no, fuimos a hacerles una visita.

Fue muy gracioso, estaban todos apelotonados unos encima de otros, cuando había espacio por todos lados, pero bueno, se quieren mucho ya veis

Después de visitar a los leones marinos, dimos un paseo por una calle llamada Fishermans Wharf y llegamos a los Cable Cars, muy famosos en San Francisco, y cogimos uno de ellos hasta Union Square, donde pasamos la tarde, de compras y explorando los barrios de San Francisco.

Los Cable Cars, ¿sabéis los típicos tranvías que se ven en las series de Disney Channel yendo por las calles? Pues si, esos mismos.

Marta y yo tuvimos la suerte de poder ir en la parte de atrás un ratito, y la verdad fue una sensación increíble. El sentir el tranvía moviéndose, el viento moviéndome el pelo, ver como lentamente subíamos la colina y llegar a tener una preciosa vista de la bahía al llegar arriba... No es comparable a nada... Es increíble.

Cuando nos bajamos, Pablo, Marta, Bea, Hajin y yo nos fuimos a explorar los alrededores de Union Square, nos metimos en un par de tiendas, sacamos fotos subidos a un Cable Car que estaba allí parado acabamos paseando por un barrio lleno de graffitis preciosos, llegamos hasta el Financial District y hasta tuvimos que ir corriendo al Burger King por dos razones, había hambre y se puso a llover, lo que en Galicia llamamos un gran chaparrón, y claro, allí esperábamos, porque como sabemos por allá... nunca choveu que non escampara, non si?

Y cuando escampó, seguimos con el paseo, con parada en Starbucks incluida y baile en el medio de la calle también, acabando metiéndonos en una Nike Store, porque yo soy así y a mi me gusta entrar en esos sitios.

Después de explorar Union Square y alrededores nos dimos un pequeño paseo el bus por varios barrios de la ciudad, el barrio italiano, chinatown... y subimos hasta la parte de arriba de Lombard Street, la que le llaman la calle más curva del mundo, de arriba a abajo todo curvas. Costó llegar arriba por dos razones, era empinada, y además me dio por subir la mitad de la cuesta corriendo, porque soy así de inteligente, bien María. Pero las vistas desde arriba eran preciosas, valían la pena.

Y a la bajada a Pablo y a mi se nos dio por ir bailando Uptown Funk delante de la cámara con la que Alex estuvo grabando todo el viaje, y allí estábamos, dándolo todo.

Luego nos fuimos a un museo llamado De Young Museum, que tenía un observatorio precioso donde se podía ver todo San Francisco.

Y de un mirador a otro, pillamos el bus y nos fuimos a la cima de una colina, lloviendo y con frío, pero había que salir a sacar fotos, porque la vista era una de las que te dejan con la boca bien abierta, aunque estuviese nublado.

Y para acabar el día, nos fuimos a explorar Chinatown, a hacer alguna compra y a cenar allí. Y hasta hablamos con uno de esos macacos que te predicen el futuro, Zoltar o como los llamen.
Importante: durante la cena Pablo y yo nos improvisamos un concierto haciendo de baterías con los palillos chinos, y después como somos muy listos tuvimos que pedirle a las chicas asiáticas que nos enseñaran a cogerlos.

Madre mía que larga me va a quedar la entrada por dios.

A mañana siguiente después de un desayuno más ligerito que el del primer día, nos dirigimos al puente de San Francisco.

Y allí estaba, se veía entre los árboles.

"5 minutos para sacar fotos" dijo Halsey.

Miré al fondo y vi un espacio completamente vacío, justo al final de una pequeña cuesta.

"Pablo, vamos allí" dije antes de cogerle la mano y echar a correr hacia el puente de mis sueños.

Y en el momento en el que llegamos y lo vi, allí, sin nada delante, sólo el puente, el pacífico y yo, una sensación de orgullo y emoción subió por mi estómago y invadió mi cuerpo, manífestandose en forma de lágrimas de emoción.

"Dios... ahí está, es real" pensé mientras abrazaba a Pablo.

Y después de la retahíla de fotos, empezó a llover. "¿Queréis cruzar igual?" preguntaron las monitoras, y obviamente lo cruzamos, con viento, frío y sin chaqueta (lo siento mamá) y fue uno de los mejores momentos de mi vida. Foto por aquí, foto por allá, que si corre por allí, que si saca el palo selfie, que si el quedarme embobada mirando el puente, que si patatín patatán, fue increíble. Acabé mojada de arriba a abajo, pero era feliz, más feliz que nunca.

Después de cruzar el puente, nos fuimos al Pier 39 a comer otra vez, y por la tarde, visitamos la prisión federal de Alcatraz, una prisión de alta seguridad que está en desuso desde los años 60, pero "acogió" a presos como Al Capone, un famoso gangster estadounidense.

Hicimos el audiotour y la verdad esque fue muy muy interesante. Nos llevaron por alrededor de las celdas, la biblioteca, el comedor, las oficinas y hasta nos metimos por un pasillo que daba un poco de repelús, pero estaba super guay. Hasta nos metieron en las celdas y todo, la verdad seque no eran tan incómodas, ya bien se podían pasar allí, no? jajaja

Si, me dejaron allí un ratito metida, eso me pasa por ir gritando por todos lados, si esque María eres tonta joe.

Después de Alcatraz, nos fuimos a tomar helado fuimos hasta la playa, donde más de uno se mojaron los pies porque son muy listiños y se emocionaro demasiado al ver la playa después de 7 meses (no, yo no, yo sólo eché a correr gritando "VAMOS A LA PLAYA A MI ME GUSTA BAILAR AL RITMO DE LA NOCHE SALSA FIESTSA" pero nada más) y también tuvimos más tiempo para hacer compras por el Pier y Fishermans Wharf (AAAAAAALAAAAA A GASTAR), compramos subvenir, sacamos fotos en uno de estos photoboots como los de las pelis, nos sentamos al lado del mar, paseamos de arriba a abajo, fuimos al Hard Rock café y por la noche nos fuimos a cenar a... Bubba Gump (los que habéis visto Forrest Gump sabéis de lo que hablo y la relación con la peli, y los que no... pues vedla).

Además Pablo y yo tuvimos una conversación super interesante que me hizo sentir mazo de inteligente, y mientras él no se daba cuenta yo le robaba patatas y gambas, pero sin fallo, sin fallo.

"Mamma said they was magic shoes, they could take me anywhere."- Forrest Gump

Y con esto la aventura en San Francisco llegó a su fin, risas, gente y memorias, eso es viajar. Fueron dos días geniales, conocí a gente increíble, me reencontré con buenos amigos, visité sitios de película y cumplí sueños.

Pero hay más, mañana llega la entrada sobre LA, "welcome to the land of fame, excess" más aventuras, más memorias y más risas, mañana en Long Way To The Usa, estad atentos!

(Lol eso me acaba de quedar como un anuncio JAJAJAJA)